"¿PORQUE TIENES QUE SER MEJOR PERSONA?"

Alguien que se siente satisfecho con su estilo de vida, se mostrara feliz, con una actitud positiva, generara impactos emocionales positivos cuando interactúe con la gente y esto definitivamente motivara a las personas que se sienten deprimidas.
Este es un gran ejemplo de alguien que absolutamente sabe cómo ser una mejor persona, porque su esencia genera buenas sensaciones en los demás.
Debes esforzarte por ser una mejor persona porque definitivamente no quieres formar parte de ese grupo de gente que vive amargados, con caras largas y con cero humildad ante la vida.

Ser mejor persona

Créeme no le desearías ni al peor de tus enemigos tener una actitud así, porque al ser una persona fría y amargada, lo único que logras es comportarte de manera antipática, mantener una cara de pocos amigos y asustar a cualquiera que decida hablarte y en el peor de los casos te ganas una discusión o pelea con otra persona justamente por tener ese mal carácter que solo provoca ira y rencor en los demás.

Deberías esmerarte por ser una mejor persona, porque eso te acercara mucho más al éxito, porque el hecho de ser una mejor persona, hará que estés mejorando constantemente tu personalidad y esto provocara que desarrolles más tu inteligencia emocional.
Al ser consciente del bienestar que te otorga el ser una mejor persona, ya no te molestara cruzarte con alguien que tuvo un mal día, no te engancharas en su estado emocional negativo, porque estarás seguro de ti mismo y lo más importante es que al ser una mejor persona, inevitablemente desarrollaras una autoestima sólida.
Además, ser una mejor persona es una de las tantas formas que existe de llegar al éxito, imagínate, quien tiene más probabilidades de ascender en el trabajo:

¿Alguien que es un amargado, que se comporta de manera egoísta y que trata mal a todo el mundo como si la vida estuviera en deuda con el?
O
¿alguien que tiene un buen humor, que mantiene una actitud humilde y que se dedica a prestar su ayuda cuando los demás lo necesitan?

El arte de vivir